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¿El software libre es gratuito?

Como consecuencia indirecta de las condiciones que debe cumplir el software libre para serlo, la mayoría del software libre es considerado en numerosas ocasiones como software gratuito.

Si cualquier usuario puede distribuir copias de un programa de software libre determinado, alguno de esos usuarios puede decidir hacerlo cobrando por esas copias, pero podemos suponer que difícilmente tendrá éxito si no aporta un valor añadido, ya que cualquier otro usuario que puede decidir distribuir copias del mismo software por un precio inferior o de manera gratuita.

En la explotación de ese valor añadido, que pueden ser el conocimiento de experto, la formación, la asistencia técnica, la integración en un entorno determinado o el desarrollo o mejora de prestaciones específicas, es en lo que basan su línea de negocio muchos trabajadores por cuenta propia (freelances) y empresas que están detrás de proyectos y desarrollos destacados de software libre; en algunos casos se trata de grandes empresas como Red Hat (adquirida por IBM en 2019) o Canonical, pero en otros son pequeñas empresas, grupos de voluntarios o desarrolladores independientes que no cuentan con un modelo de negocio definido claramente para la explotación comercial del proyecto y lo financian dedicándole tiempo y recursos propios o a través de las donaciones voluntarias de empresas y particulares que deciden apoyar de este modo que el proyecto siga su curso.

Es posible descargar gratuitamente, a través de las páginas de sus sedes en Internet, la mayoría de aplicaciones a las que me refiero en este texto; pero, del mismo modo, también es posible hacer donativos para financiar o apoyar su desarrollo.

Desde la página web de Ardour, por poner un ejemplo de un caso ligeramente distinto a la mayoría, es posible descargarse gratuitamente el código fuente de la aplicación, que deberá compilarse para que pueda ser utilizado; también puede descargarse una versión compilada para GNU/Linux o Mac OS X pagando como mínimo 1$; y, si se considera más conveniente, puede pagarse 1$, 4$ ó 10$ al mes (ó 50$ al mes en el caso de instituciones que quieran apoyar el desarrollo y mantenimiento de la aplicación); como se prefiera.